Reportajes
Daniel Pastor renueva su compromiso con el patrocinio de la muestra “Toulouse-Lautrec y el circo”
05 de febrero de 2020
La nueva exposición de contexto Toulouse Lautrec y el circo, que se inaugurará el próximo 21 de febrero con el patrocinio del despacho de abogados Daniel Pastor y la marca “Iuris Cátedra. Abogados, Economistas y Auditores”, tras la renovación del acuerdo alcanzado entre ambas entidades con el objetivo de apoyar y difundir la cultura.
Por tercer año consecutivo, el Museo Carmen Thyssen Málaga contará con la colaboración de este consultor quien se inició en 2017 con el patrocinio de la exposición Goya-Ensor. Sueños al vuelo y continuó en 2018 con el de la muestra Henri Matisse. Jazz.
El gerente del Museo, Javier Ferrer, valora esta aportación privada y destaca que “estamos muy satisfechos del apoyo de profesionales como Daniel Pastor que apuestan con el Thyssen Málaga por la conservación de la cultura española y reconocen en este Museo un motor para el turismo cultural de nuestra ciudad. Son tres años y tres exposiciones en las que ha mantenido su respaldo económico, por lo que es justo que le reconozcamos públicamente su compromiso con la cultura”.
La aportación realizada cubrirá prácticamente la financiación de Toulouse-Lautrec y el circo y hará posible la contemplación de las estampas de la serie “Au cirque” [En el circo], pertenecientes a la colección de Jean Pierre Gimbergues, que fueron editadas entre los años 1905 y 1931 a partir de dibujos originales de temática circense del artista francés, junto a otras ilustraciones del mismo asunto, publicadas en la prensa de la época o en otros portafolios, como la famosa “ClownesseCha-U-Kao”.
Los personajes de los diversos espectáculos circenses parisinos que tenían lugar en el circo Fernando, el Nouveau Cirque, y en cabarets como el Moulin Rouge o el Folies-Bergère, de los que Lautrec fue asiduo asistente y retratista habitual, centran las imágenes recogidas en la exposición, componiendo una serie de imágenes en las que acróbatas, payasos y domadores ensayan y ejecutan sus números ante un espectador que se convierte en asistente privilegiado a la función circense.