Garrochista, Sevilla
Joaquín Sorolla y Bastida

Garrochista, Sevilla

1914
  • Óleo sobre cartón

    75 x 105 cm

    CTB.1999.22

  • © Colección Carmen Thyssen-Bornemisza en préstamo gratuito al Museo Carmen Thyssen Málaga

En octubre de 1914 comienza Sorolla los estudios previos del que sería su sexto panel para la decoración de la biblioteca de la Hispanic Society of America, una de las cinco obras dedicadas a Andalucía, El encierro.

En primer lugar se desplaza a la finca El Cuco, invitado por el Sr. González, para pintar sus viñas con el tono dorado del momento de la vendimia. En la semana que reside en dicha finca, pinta diez cuadros de estudios de vides, según relata a su mujer en las cartas que diariamente le escribe. Pero no sólo dedica esos días a pintar aquellos estudios, también realiza breves desplazamientos por la región buscando el fondo de su panel, después de comprobar que no es el pueblo de Jerez el lugar para pintar su cuadro, pues como comenta a su mujer «enfermaría de tristeza», ni es el paisaje de vides el que desea únicamente para su fondo.

En una sola jornada visita el Puerto de Santa María, Puente Real, San Fernando, La Aguada y Cádiz, donde su amigo Felipe Abárzuza desea mostrarle un techo que está pintando. Buscaba en principio campo, viñas y fondo de mar, pero tampoco allí encuentra lo que desea y decide regresar a Sevilla. A las afueras de esta ciudad, en la finca Tabladilla, con la típica vegetación del campo de secano andaluz, monta su gran panel, al tiempo que realiza numerosos estudios de piteras, garrochistas y campos de olivos. También se desplaza a la finca Las Delicias, de la ganadería Mihura, donde toma los apuntes para los toros y mansos que aparecerán en su gran cuadro.

Son en total siete los estudios preparatorios de garrochistas y jinetes para su panel El encierro. Cinco de ellos son de formato medio y dos son apuntes de pequeño formato. Los cinco primeros con la figura de un único garrochista o jinete son: Garrochista. Sevilla, el que aquí presentamos, que procede de la testamentaría de Sorolla en la que fue inventariado y adjudicado a su hija Elena con el n.o 13 de la serie K; Garrochista y toro, que, como el anterior, procede de la testamentaría de Sorolla en la que fue inventariado y adjudicado a su hija Elena con el n.o 14 de la serie K; Garrochista, dedicado a su amigo Miguel Hernández Nájera; Estudio de jinete entre chumberas, dedicado a su amigo Andrés Sirabeña; y Jinete con fondo de chumberas, inventariado en la testamentaría de Sorolla con el n.o 100 de la serie Q, adjudicado a su esposa Clotilde García del Castillo, y que forma parte de la colección del Museo Sorolla (inv. 1.091). .

De estos cinco estudios, los tres primeros, precisamente los de garrochistas, son óleos sobre cartón sin imprimación, y los dos segundos, los jinetes, son óleos sobre lienzo. Al estar pintados los primeros en cartón sin imprimación, adquieren un cierto aspecto de gouache, que sin duda es lo que motivó que dos de ellos, los únicos que conocía, fuesen catalogados por Bernardino de Pantorba en su libro La vida y la obra de Joaquín Sorolla (Madrid, 1953 y 1970), con una técnica equivocada (véanse los n.os 856 y 857 de su catálogo).

Los dos apuntes de pequeño formato, con varias figuras, son: Jinetes y garrochistas, inventariado en la testamentaría de Sorolla con el n.o 51 de la serie B y adjudicado a su hija María, y Garrochista en el campo, inventariado también en la testamentaría de Sorolla con el n.o 52 de la misma serie y con la misma adjudicación.

Todos estos estudios de jinetes y garrochistas los inicia el 31 de octubre, ya que hasta entonces ha estado más preocupado por encontrar los fondos para su obra. Probablemente pintó primero los cuadrosJinete con fondo de chumberas y Estudio de jinete entre chumberas, cuyas figuras no utilizó. Siguiendo esta hipótesis, el cuadro Garrochista. Sevilla, obra que aquí se estudia, sería pintado entre los días 2 y 5 de noviembre, según los datos de la correspondencia familiar.

En este cuadro, la posición del caballo y del garrochista guardan cierta similitud con el jinete y la jaca protagonistas del panel El encierro. Sin embargo, la jaca definitivamente elegida es torda, que es precisamente la que aparece en los otros dos cuadros de garrochistas. La figura de caballo de capa marrón la utilizará en el garrochista situado a la izquierda, que, sin embargo, por su colocación guarda más parecido con el representado en el estudio de Garrochista y toro.

Esta obra, de rápida ejecución, y pintada con óleo muy diluido en aguarrás, deja a la vista el color natural del cartón, consiguiendo un efecto muy similar al obtenido en el Boceto para Las regiones de España. Andalucía. El encierro, que se encuentra en la Hispanic Society of America, sólo que este último sí es un gouache sobre papel.

El panel El encierro lo concluyó Sorolla el 14 de diciembre, siendo el segundo en tamaño de la decoración de la Hispanic Society. Como dice José Luis Díez: «tan madurado proceso dio efectivamente como resultado una de las composiciones más impresionantes de toda la Hispanic Society, en la que varios mayorales conducen una nutrida manada de toros bravos a lo largo de un polvoriento camino de chumberas, atravesando las vías del tren, que cruzan el primer término».

Blanca Pons-Sorolla